La presencia

La presencia es un estado de consciencia a través del cual el individuo se pone en posición de observador de su entorno, de los eventos.

En este estado ya no espectador pasivo e inconsciente, sino actor activo y consciente.

Es entonces capaz de sentir las emociones que los eventos despiertan en él, y ya no sólo de dejarse llevar por respuestas “automáticas” nacidas de sus creencias, ellas mismas basadas en sus heridas y traumas del pasado. Puede disociar el “mensaje” del “mensajero” y asumir su parte de responsabilidad en los acontecimientos sin echarle la “culpa” al otro.

Es cuando dos personas están en presencia cuando puedo surgir un compartir sincero y honesto que puede llevar a una toma de consciencia sanadora.

En esto consiste el trabajo acompañante-acompañado, y es la base de cualquier relación sincera y consciente.